La edición más exitosa de OT ha terminado (aunque el furor sigue en pie). Este año l@s chic@s de la academina han triunfado y durante meses los hemos visto por todas partes, ¡viésemos el programa o no! Del grupo que entró en la Academia hemos podido aprender muchas cosas que creemos que son aplicables a Raz SurfCamp. Cuando venís a Razo a surfear, no olvidéis traeros bien aprendidas estas lecciones que los triunfitos nos dieron a tod@s. Y, si no tenéis pensado venir a vernos, estas lecciones os servirán también para vuestro día a día en el mundo del surfing.
foto: vertele.eldiario.es
Compañerismo. Es la base de la pirámide. En Raz SurfCamp tod@s formamos parte de la misma familia y tod@s nos apoyamos. Nos gusta que el ambiente sea cómodo y de confianza, ¡que fluya el buen rollo por todas partes! En un ambiente como este, resulta mucho más fácil expresarse y lanzarse a lo loco a probar, por ejemplo, nuevas maniobras sin el temor de «quedar mal».
Honestidad. Expresarnos en cada momento, compartir nuestros pensamientos, nuestras preocupaciones, ¡incluso reconocer grandes méritos de nuestr@s compañeros! Son detalles que parecen sencillos pero, a menudo, cuentan. Y, sobre todo, en Raz SurfCamp nos encanta que seais honestos en el sentido de ser vosotr@s mism@s. ¡Queremos conoceros tal y como sois!
Trabajo. ¡Sin trabajo y constancia no hay paraíso, Raz SurfCampers! En la academia trabajaban muy duro cada día para lograr dar lo mejor de sí mism@s, ¡y con el surfing funciona igual! Cuanto más practiquéis y más tiempo le dediquéis, más conseguiréis avanzar hacia vuestras metas. Nosotr@s, en Raz, siempre queremos disfrutar a tope, ¡pero en las clases hay que darlo todo!
Humildad. ¡Porque es una de las claves del buen rollo! La humildad no puede faltar y es que en Raz SurfCamp nadie es mejor que nadie, ¡tod@s disfrutamos la experiencia por igual! Si incluso Kelly Slater es humilde… ¿cómo no serlo nosotr@s?
Mente abierta. L@s chic@s de Ot sorprendieron por su mentalidad abierta y esto a nosotros nos flipa. Tener la mente abierta significa no tener horizontes ni limitaciones a la hora de descubrir el mundo, las personas, las olas… Y, por ejemplo, aceptar otras culturas en un surftrip es algo fundamental para un surfer.
¿Vendréis con la lección aprendida? 😉